CEM12/MI-6 Chile
Clean Energy Ministerial 12 / Mission Innovation 6
El Clean Energy Ministerial fue creado el año 2010 para facilitar e incentivar la transición a una economía global sustentada en energías limpias. Los miembros del CEM son responsables de, aproximadamente, el 75% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Mission Innovation, por su parte, se puso en marcha el año 2015, durante la COP21, y se centra en innovación y tecnología para el desarrollo energético.
La 12ava versión del Clean Energy Ministerial y la 6ta de Mission Innovation se llevaron a cabo, como evento virtual conjunto, entre el 31 de mayo y el 6 de junio, siendo organizados por el Ministerio de Energía de Chile, en colaboración con GIZ. Esta es la primera vez que estos eventos se realizan en un país sudamericano, lo cual demuestra el compromiso de Chile en la lucha contra la crisis climática.
El evento reunió a más de 24 países y a la Comisión Europea para compartir sus avances en transición energética y la descarbonización del sector energético mundial. La edición de este año vio el lanzamiento de las próximas fases para ambas iniciativas: el CEM 3.0 y MI 2.0. CEM12 apuntó a promover tres aspectos claves de las energías limpias: escala, sectores, y sociedad, mientras que MI-6 apuntó a acelerar el despliegue de energías limpias gracias a la innovación a escala mundial.
Además de las reuniones ministeriales, la semana también contó con más de 60 horas de side events y trigger talks; cada una organizada por distintas entidades, donde se llevaron discusiones desde cómo la energía nuclear puede ser utilizada como una fuente de energía de transición, hasta el rol que la juventud tiene, y debería tener, en la transición energética.
Uno de estos side events fue organizado por el grupo energético de GIZ Chile, y fue titulado “Innovative Conversion of Coal-fired Power Plants”; aquí, Rainer Schröer y nuestros honorables invitados, Michael Geyer y Hanno Balzer, discutieron sobre las características y usos de las diferentes tecnologías de almacenamiento térmico, dándoles una segunda vida a las centrales eléctricas de carbón ante la salida necesaria de este combustible, para alcanzar los objetivos climáticos mundiales.